Reflexiones acerca
del paro de la COB
M. Javier Astorga M.
Es bueno tener siempre el pasado, presente en nuestro ideario para
formar nuestras propias construcciones conceptuales. El paro decretado por la
COB se brinda para ello. No es mi intención hacer un análisis exhaustivo de las
causas y las consecuencias que éste paro
deparará en un futuro inmediato, sólo reflexionar acerca de algunas
declaraciones de los dirigentes de este movimiento.
Por ejemplo se escucha del principal dirigente de la COB quién dice que
no le motiva ningún afán golpista, le creemos, ya que es un dirigente de la
vanguardia que según la teoría marxista debería dirigir la revolución
proletaria. Pero, los que están batiendo palmas felices de contentos por el
desarrollo de los actuales acontecimientos son aquellos que quieren que este
proceso de Cambio que recién empieza se
derrumbe, es la derecha reaccionaria y neoliberal con todos sus agentes
fascistas que fueron derrotados sistemáticamente por los Movimientos Sociales,
no por la COB, en el 2000, en el 2003 y en el 2008.
No es casual por eso que la mayoría de
los noticieros abran sus emisiones informativas mostrando una verdadera
convulsión en Bolivia similar o mucho peor, afirman, que lo que pasó en octubre
del 2003 en tiempos de Sánchez de Lozada
y demás neoliberales, nada raro sería entonces que estos derechistas
terminen pidiendo la intervención de la
OTAN en cuanto aparezca un muerto que para las huestes fascistas es lo más
fácil de lograr, arguyendo que existe un clima dictatorial y de suma represión.
Así que hay que decirle a este dirigente que en toda su ingenuidad (eso
queremos pensar) está sirviendo inconscientemente (eso queremos creer) a los
intereses de los enemigos del Proceso de Cambio, que por lo visto sólo se replegaron o se
camuflaron inclusive en las filas del neo-masismo.
Otro ejemplo, escuché a otro dirigente que efusivamente decía que ellos
habían llevado a Evo al poder y que ahora o en cualquier momento lo pueden
sacar del mismo. Otra ingenuidad, éste dirigente cree que al poder se llega
solamente por los votos, cuando el proceso que atravesamos y que tardará mucho
tiempo en consolidarse es producto de la acumulación de hechos históricos
violentos y del ascenso de las clases y movimientos sociales que ha permitido
el desplazamiento de las clases dominantes nativas pro-imperialistas pero aún
no su eliminación. No puede diferenciar éste dirigente entre un cambio de
gobierno y entre un cambio de modelo de civilización que es lo que realmente
persiguen los movimientos sociales. No dudamos que tengan razón al
reclamar la recomposición de
alguna clase de inequidad, como una jubilación justa, pero lo que no entendemos es la forma de
exigir sus demandas, comprometiendo el Proceso de Cambio que empieza, y que tenemos la obligación de consolidar.
Estos dirigentes no comprenden el momento histórico que estamos
atravesando en el plano mundial y continental, por eso para ellos es lo mismo
exigir a un gobierno neoliberal que a un gobierno como el actual, Gobierno que
propone todo un Cambio Social, pero que no es el Cambio mismo. Convulsionar el
país de esta manera por la aplicación de la ley de pensiones 065 que fue
aprobada por la misma COB en el 2010 y que de lejos es superior socialmente a
la ley de pensiones neoliberal 1732 de Sánchez de Lozada a la que ni la
COB ni menos los maestros se
opusieron en su momento, definitivamente no lo podemos entender salvo que
existieran otros motivos ocultos.
Pero una cosa es la COB y otra muy diferente es la COD de Tarija. Desde
su composición salta a la vista que no hay proletarios en esa Institución o que
existen en una mínima proporción, los que dirigen esta entidad o son empleados
de clase media o son maestros urbanos o rurales. Detengámonos un momento para
analizar su actuación política desde el
2003 sin ir más lejos. El 2003 juntamente con el comité cívico de aquel
entonces apoyaron entusiástamente el proyecto LNG que intentaba regalar el gas
que es propiedad de todos los bolivianos en un negocio oligárquico – imperialista
que estuvo a punto de consumarse de no haber intervenido la heroica resistencia
de los bolivianos en sus capas más humildes lideradas por el pueblo alteño.
Posteriormente desde el 2006 empleados de clase media, maestros y otros que se
encaramaron en la dirección de la COD Tarija, se opusieron firme y tenázmente al desarrollo y consolidación de la Asamblea Constituyente apoyando sistemáticamente
la consigna de los 2/3, luego la
Capitalía Plena y por último hicieron
campaña por el NO en el referéndum por la aprobación de la Nueva
Constitución.
Es claro entonces que esta entidad conformada y dirigida por empleados
de las Cooperativas, por maestros urbanos, por empleados en salud y otros
sectores reaccionarios estuvieron siempre del lado de los partidos neoliberales
pro–oligárquicos y por la conservación del statu quo que fue derrotado por el triunfo electoral del compañero Evo
Morales como producto del agudizamiento de las contradicciones sociales, de la
nueva correlación de fuerzas y el ascenso de masas que desembocaron en el
actual Proceso de Cambio liderado por un dirigente indígena. Es a éste Proceso de cambio, que se posesiona
legal y legítimamente hace menos de 8 años y que ha conseguido reponer económica
y socialmente en este poco tiempo lo que el neoliberalismo nos robó en más de
20 años, al que los revolucionarios nos
afiliamos y que tenemos la obligación de cuidarlo y defenderlo para que nadie y mucho menos estos serviles del
neoliberalismo y sus clases oligárquicas (maestros urbanos, empleados de
Cooperativas SEDECA, salud y otros), tienen el derecho de poner en riesgo algo
por lo que nunca lucharon, con
exigencias corporativas que nada tienen que ver con la solidaridad de clase,
sectores éstos que no conocen lo que es solidaridad proletaria, y que sólo persiguen intereses propios del
individualismo capitalista.
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