jueves, 30 de agosto de 2012

El Movimiento Comunista Internacional, DEBE SALDAR CUENTAS CON JRUSCHOV Y LOS CONGRESOS XX Y XXII DEL PCUS

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30-08-12
Inter. No. 130.
El Movimiento Comunista Internacional, DEBE SALDAR CUENTAS CON JRUSCHOV Y LOS CONGRESOS XX Y XXII DEL PCUS
Es posible que existan todavía en el ancho mundo partidos y partidarios que consideren que el ex-primer ministro soviético Nikita  Sergeyevich Jruschov, (1956-1964), fue un revolucionario, un democratizador del socialismo o un verdadero comunista, y que tenía la intención de “humanizar” el socialismo en lugar de destruirlo, como en realidad ocurrió.
En esta virtud, y para que en el futuro no existan dudas del carácter profundamente reaccionario y anti-comunista del antiguo “líder soviético”, tenemos la obligación de transcribir la parte sustancial de la resolución más importante que aprobó el XXII Congreso del PCUS en 1961, un documento que ha quedado en el olvido por su carácter completamente atrabiliario, desubicado y trasnochado con el nombre de:  
«PROGRAMA DEL PARTIDO COMUNISTA DE LA UNION SOVIETICA»
El documento, en sus partes salientes, dice:
«En el próximo decenio (1961-1970), la Unión Soviética que ha creado la base material y técnica del comunismo aventajará en la producción per cápita a Estados Unidos, el país capitalista más poderoso y rico; se elevará considerablemente el bienestar material y el nivel cultural y técnico de los trabajadores, et., etc.
En el segundo decenio (1970-1980), se habrá creado la base material y técnica del comunismo, se habrá asegurado a toda la población abundancia de bienes materiales y culturales, la sociedad soviética habrá llegado al umbral mismo de la aplicación del principio de la distribución según las necesidades y se efectuará el paso gradual a una sola forma de propiedad, a la propiedad de todo el pueblo. Por consiguiente, en la URSS se habrá construido, en lo fundamental, la sociedad comunista.
La sociedad comunista se edificará por completo en el período siguiente.
EL PARTIDO PROCLAMA SOLEMNEMENTE: ¡LA PRESENTE GENERACIÓN SOVIÉTICA, VIVIRÁ EN EL COMUNISMO!...»  (*)
Cuando el Movimiento Comunista Internacional, conoció este documento, se produjo casi inmediatamente una división irreconciliable entre dos grandes tendencias. Por una parte quiénes lacayunamente y cerrando los ojos, creyeron ver en el mismo el triunfo histórico de la revolución mundial y por otro una tendencia que sin perder un solo minuto condenó como un verdadero desatino esas predicciones ridículas. La dirección soviética sometida a los desvaríos jruchovistas tuvo que ser muy ignorante de la realidad política, social y económica para aceptar esos pronósticos mucho más considerando que supuestamente, se trataba de una dirigencia probada en el conocimiento del materialismo histórico. Los verdaderos comunistas con prontitud hicieron conocer su rechazo tanto al susodicho “Programa” como a la aprobación que ya se había hecho en el XX Congreso de censurar el llamado “Culto a personalidad de Stalin”.
Si comparamos estos párrafos transcritos con lo que ocurrió precisamente el decenio siguiente (1980-1990) podemos comprobar que muy lejos del cumplimiento de los desvaríos jruchovistas, desapareció el Partido Comunista (PCUS), desapareció la Unión Soviética (URSS) y desapareció el campo socialista construido trabajosamente después de la Segunda Guerra Mundial por el camarada Stalin.
Como se puede apreciar, únicamente aquellos revisionistas empedernidos pueden actualmente (2012), sostener los puntos de vista de los congresos XX (1956) y XXII (1961) del extinto PCUS.
Pero también existen partidos y partidarios (www.civilizaciónsocialista) que censurando pálidamente a Jruschov, cantan loas y alabanzas a sus sucesores como Brejnev, Mikoyan, Suslov, Kosiguin, Gomulka el polaco traidor, Kadar, el húngaro traidor,  Ceaucescu el rumano traidor, Yivkok, el búlgaro traidor, Hoeneker, el alemán y el checo Novotny, traidores al marxismo y seguidores lacayunos de Jruschov y otros revisionistas impenitentes. No es pues posible separar al payaso mayor de sus acólitos que después de desalojarlo, siguieron militantemente el mismo rumbo rabiosamente anti-estalinista.
En el pasado reciente se ha criticado acremente el famoso “Informe secreto” del XX Congreso donde aparece la infeliz “doctrina” del “Culto a la personalidad de Stalin”, empero no se tuvo conocimiento público del engendro en la propia Unión Soviética, pero sí en el mundo occidental donde llegó por la infidencia del propio Jruschov que en su país negaba la existencia del documento. Este documento llamado “Programa”, supera ampliamente al anterior por su ridiculez y desubicación.
*     *    *    *
Ahora bien, hace poco hemos conocido una noticia muy importante del Partido Comunista de Grecia (KKE), que en solemne sesión y por resolución de sus organismos directivos y después de una profunda investigación, según el informe, ha procedido a rehabilitar al viejo y valeroso Secretario General del Partido el camarada Nikos Zachariadis. (1936-1946) (**)
Sabemos bien, que la revolución griega fue derrotada por la invasión inglesa después de una heroica guerra civil protagonizada por el Partido; en consecuencia las tropas guerrilleras del Ejército de Liberación griego tuvieron que buscar refugio de las fronteras salvadoras de Albania de Enver Hoxha frente a la traición de Tito el yugoeslavo que cerró maliciosamente sus fronteras comunes con Grecia y condenó a muchas unidades guerrilleras a la aniquilación por parte de los invasores ingleses...
La Unión Soviética procedió a conceder asilo a más de 18 000 guerrilleros que lograron llegar a Albania siendo recibidos con todos los honores en la Unión Soviética de Stalin.
Sin embargo, apenas accedió al poder Jruschov después de la muerte de Stalin, inició su conocido camino de la traición al socialismo y fue precisamente Nikos Zachariadis que se encontraba en Taskent junto a los guerrilleros griegos, una de las víctimas del nuevo curso al oponerse enérgica y revolucionariamente a plegarse a la línea revisionista de Jruschov. Como consecuencia de esa resistencia heroica esta vez contra el revisionismo, Nikos fue cobardemente asesinado por órdenes de Jruschov.
Como sabemos, el KKE, a partir de entonces 1956, se convirtió en uno de los partido “comunistas” más revisionistas como una ficha miserable a las órdenes de Jruschov. 
En este contexto, ¿qué significa entonces para el “K” KE y el revisionismo en general esta rehabilitación? Pues sencillamente que Zachariadis tenía toda la razón y Jruschov fue un completo traidor, además de asesino de grandes líderes revolucionarios.
Empero, extrañamente, Aleka Papariga, la Secretaria General del “K” KE no hace la menor referencia a la postura marxista–leninista y stalinista de Zachariadis y procede simplemente, ante la presión de todos los verdaderos comunistas griegos, a una rehabilitación personal de Zachariadis, haciendo abstracción del carácter principista anti-revisionista de la vida y obra de Nikos. No se puede separar  a Nikos Zachariadis de su lucha contra Jruschov y su camarilla corrupta.
En realidad el revisionismo en general y en particular el revisionismo griego no tiene ninguna autoridad de “rehabilitar” a Zachariadis, porque si esa rehabilitación fuera sincera, debieran condenar taxativamente a Jruschov y consecuentemente a los congresos XX y XXII.
El caso emblemático de Nikos Zachariadis nos impulsa a plantear una línea divisoria muy clara con aquellos grupos que llamándose todavía “comunistas” y persistiendo en la línea de los congresos XX y XXII del PCUS revisionista, pretenden seguir representando al Movimiento Comunista Internacional. Esta línea divisoria significa que todos los partidos que se autotitulan comunistas, tienen la obligación de hacer conocer con toda claridad sus posiciones frente a los congresos citados y que condujeron a la derrota histórica del comunismo en el siglo XX.
Solamente así será posible reconstruir sobre bases sólidas el poderoso Movimiento Comunista Internacional.
Nota. Ponemos en negrillas las expresiones del “Programa” para su cabal apreciación.
 (*)   “Programa del Partido Comunista de la Unión Soviética”. (Proyecto) Ediciones de la Revista “URSS”.  Montevideo. Págs.70-71 y 153.
(**)   En el Cuaderno de Liberación No. 34. Aparece el documento de los camaradas griegos que relatan la lucha heroica de Zachariadis contra el revisionismo cuyo título es “La lucha de los comunistas griegos contra el revisionismo”.
PCmlm


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