11-06-11
Comentario Internacional No. 54.
SOLIDARIDAD CON LA HEROICA
NACIÓN MAPUCHE
Hoy el gobierno de la oligarquía chilena oligárquica, expansionista y agresora de sus vecinos y especialmente de Bolivia, está presenciando la insurgencia vigorosa de la Nación Mapuche como pueblo originario y ancestral, por lo tanto propietario legítimo de una milenaria cultura y de amplios espacios territoriales del actual Estado uni-nacional chileno opresor y colonialista.
No obstante la agresión racista y colonialista de los herederos de Augusto Pinochet y Diego Portales, la Nación Mapuche se levanta exigiendo sus derechos y reivindicaciones que son respondidas brutalmente por el Estado uni-nacional chileno con el manido y desacreditado pretexto creado por la reacción del “terrorismo”. Por el contrario son los delitos de etnocidio y de memoricidio los que cometen los gobernantes y las clases dominantes chilenas contra un pueblo milenario que ya no podrá ser sometido como lo fue en el pasado reciente.
El intelectual y dirigente mapuche Héctor LLaitul Carrillanca, encarcelado por “terrorista” en la prisión de Angol, nos entrega un importante artículo que comienza así:
«El actual mundo globalizado persigue la homogeneización de los mercados y como consecuencia y requisito la uniformidad política, social y cultural de las naciones. En ese sentido mantener y profundizar la occidentalización tiene sentido para el poder de dominación….»
«Estamos hablando de una re-emergencia nacionalitaria (*) con un nuevo tipo de sujeto histórico que levanta proyectos propios de emancipación ancestral. Un proceso nacionalitario que para los pueblos originarios – y para el pueblo mapuche en particular-- se expresa en una progresiva afirmación identitaria y nacional, punto de consenso asumido por las diversas organizaciones que platean reivindicaciones históricas, lo cual nos ha permitido lograr algo fundamental para este proceso, que es posicionar a la Nación Mapuche en el ámbito internacional….»
«La lucha de nuestro pueblo se inscribe en un contexto mayor, la preemergencia nacionalitaria de los pueblos originarios del continente en defensa de sus territorios y la conquista de su libertad. Esta es la verdadera emancipación de América…» (1)
Desde Bolivia y desde las trincheras MLM, saludamos entusiastamente la insurgencia de este heroico pueblo y de esta heroica nación mapuche que enfrenta en desigual combate a un estado racista y pro-ímperialista que emulando con la “limpieza étnica” practicada por los inmigrantes europeos en el hemisferio norte con las culturas pieles rojas, pretenden hacer lo mismo en Chile, en el seno de nuestra rebelde América Latina (Abya Yala).
La Nación Mapuche debe profundizar su actual lucha y plantear claramente el derecho inalienable a la Autodeterminación que consiste en la capacidad de definir con criterio propio la pertenencia misma al Estado uni-nacional chileno o en su defecto, su transformación en Estado multinacional con derechos políticos para las actuales naciones originarias oprimidas de Chile.
El “problema” mapuche no es un problema económico referido a la pobreza evidente de esas poblaciones solamente. Se trata de un problema eminentemente político, de un problema nacionalitario.
El actual gobierno chileno oligárquico reprime y oprime igualmente a otros pueblos milenarios como el aimara del norte y el pueblo Rapa-Nui en la llamada isla de “Pascua” (**)
El Estado/Nacional chileno, actualmente constituye un verdadero obstáculo que se opone a la corriente integracionista de nuestra América Latina y, por otra parte, sus agresiones contra sus propios pueblos originarios, lo convierte en un enemigo solapado de aquella gran corriente continental.
¡Solidaridad militante con la Nación Mapuche!
NOTAS.
(*) El concepto “nacionalitario”, como el más apropiado para identificar la problemática de la insurgencia de las naciones originarias y milenarias de Abya Yala, fue introducido por nosotros en nuestra obra: “El Desafío de las Naciones” (2). Ahora, en hora buena, es muy bien utilizado el concepto por el intelectual mapuche Carrillanca.
(**) La llamada Isla de Pascua, que en realidad se denomina Rapa-Nui (La gran Rapa), fue “descubierta” por el holandés Roggeween. Estos famosos “descubrimientos” como los de América que en realidad fue y es Abya Yala, no soportan la menor crítica, pues los pueblos “descubiertos” tienen historias más largas que las de sus presuntos “descubridores”.
(1) Le Monde Diplomatique. Edición boliviana. Año 4. No. 37. Nueva época. Junio de 2011.
(2) Echazú, Jorge. “El Desafío de las Naciones”. Liberación, editores. 2003.
PCmlm. Bolivia
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