jueves, 5 de septiembre de 2013

LAVERDADERA DISCRIMINACION EN LOS MEDIOS DE PRENSA


05-09-13
LAVERDADERA DISCRIMINACION 
EN LOS MEDIOS DE PRENSA
Se encuentra en discusión en la Asamblea Nacional, el problema de los Medios de Comunicación y su reglamentación en cuanto a los conceptos de transparencia y libertad de expresión y comunicación.
Se ha tratado y considerado muchas veces de la discriminación por causa de racismo en los medios privados de comunicación, principalmente por parte de las autoridades de Gobierno. Siendo éste un problema verdadero, sin embargo, los medios oficiales han logrado relativizar esas discriminaciones dando un espacio pertinente y amplio a las dirigencias campesinas e indígenas.
Sin embargo la verdadera auténtica y pronunciada discriminación de carácter político en razón de posiciones de izquierda revolucionaria, es mucho mayor que cualquier otro tipo de discriminación. Este extremo se puede probar cada día y cada hora y lamentablemente no sólo en los medios de comunicación privados, sino incluso en los medios estatales que tanto pregonan la lucha contra “todo tipo de discriminación”.
Es pues rarísimo escuchar en una radio, en un canal de televisión o en la prensa escrita los criterios políticos de los representantes de la izquierda revolucionaria que apoyan el proceso y tienen una posición muy clara frente a los problemas de la libertad de prensa en el medio nacional y en lo internacional. Y esta discriminación odiosa se está haciendo cada día más pronunciada en medio de un desborde de los espacios que se otorgan la extrema derecha y, también paradójicamente, a una tendencia que parecería de extrema izquierda.
Esa tendencia es pues claramente el trotskismo que goza de amplísimos espacios sobre todo en la prensa y en todos los medios radiales y televisivos de derecha y extrema derecha. Sus representantes sindicales y políticos tienen tantos espacios que parecen incluso ser propietarios de algunos de ellos.
Este parentesco entre la extrema derecha y el trotskismo no es, para nosotros, una novedad y la izquierda revolucionaria tiene que lidiar con esa alianza espuria de trotskismo y fascismo.
En estos momentos los trabajadores de los medios que están ampliamente digitados por sus patrones los propietarios de esos medios, salen a las calles ridículamente exigiendo “libertad de expresión” cuando son ellos mandados por sus amos, los dueños absolutos de la opinión general y los autores directos de la discriminación política que denunciamos.
PCmlm

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