01-02-12
Ha llegado a la ciudad de La Paz, una segunda marcha que partiendo del Parque Nacional Isiboro-Sécure, arribó a la ciudad en medio de grandes controversias en cuanto a su legitimidad.
Se ha podido observar una gran diferencia entre la marcha de la CIDOB y la marcha actual del TIPNIS.
La primera fue una gran manifestación de todos los sectores reaccionarios coaligados que se oponen, no solamente a una carretera o al Gobierno del MAS, sino, en realidad, al curso mismo del proceso de cambio y ha sido encabezada por una burocracia insensible y satisfecha que vegeta en la ciudad de Santa Cruz y Trinidad, así como en la Asamblea Plurinacional, con indígenas desclasados.
La segunda, la de los verdaderos habitantes del TIPNIS y sus 37 corregidores de las nacionalidades originarias Yurakaré, Chimane y Moxeño, en medio de una humildad conmovedora, una naturalidad muy grande y una sinceridad inocultable, con interlocutores que se expresaban en un castellano elemental y también en sus idiomas nativos, algunos de los cuales escuchamos por primera vez; planteaba, en primer lugar, el derecho legítimo y constitucional de ser consultados por el Gobierno y sobre todo por quiénes asumen arbitrariamente su representación (Art. 403, Parágrafo I. de la C.P.E.), y en segundo lugar la abrogación de la Ley Corta y el concepto de la intangibilidad del territorio indígena.
La marcha de la burocracia sindical de la CIDOB, recibió como decimos, el fervoroso apoyo, financiación, organización y estímulo de las fuerzas más derechistas y reaccionarias del país que, olvidándose por el momento, de su anti-indigenismo tradicional y sempiterno, aparecen ahora demagógicamente como grandes “defensores” de los derechos de los indígenas de tierras bajas. Recibió principalmente la amplísima cobertura de la conocida FALSIMEDIA que tiene la especialidad de magnificar hasta el cansancio lo que le conviene y minimizar hasta la invisibilización lo que no le conviene.
La burocracia de la CIDOB de los Chávez, Vargas y Nuni, ha sido convocada a una reunión de “conciliación” con la marcha del TIPNIS, sin embargo, fortalecidos por el apoyo de la derecha cavernaria y de la “embajada”, rechazan airadamente cualquier conversación y sobre todo rechazan la consulta “previa” y lo hacen porque están seguros que la inmensa mayoría de los verdaderos dueños del TIPNIS, expresarán su libre opinión sin manipulación alguna. Empero, nuestra suposición de aceptación de la carretera, deberá ser confirmada por el resultado de la consulta, en caso contrario, no se debe construir ese segundo tramo.
Ambas partes la manipulada y la auténtica deben aceptar el resultado de la consulta en el sentido que está se pronuncie.
Algunos de los abogadillos reaccionarios han argumentado que no habiéndose realizado la consulta previa, ésta ya no se puede realizar. Las consultas ciudadanas, según la Constitución Política del Estado en vigencia, son siempre realizables porque demuestran la legitimidad de las propuestas en cuestión y por lo mismo constituyen el medio ideóneo de solución de conflictos. Desde nuestro punto de vista político esa solución está muy clara. Se debe urgentemente viabilizar la “consulta” y puesto que se cometió el error de no realizarla, se debe volver a FOJAS CERO y reiniciar el proceso de consulta.
Una prueba irrefutable de la alianza espuria de la CIDOB y la derecha fascista radicada en Santa Cruz es el acuerdo firmado entre Adolfo Chávez el moderno “felipillo” y el mandamás cruceño.
PCBmlm.
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