02-06-12
EL TROTSKISMO HARAPIENTO SIGUE RUMIANDO
SUS DESGRACIAS
Trotsky colaborando con el fascismo
En el portal
KaosenlaRed, aparece un largo artículo: «Lenin y el socialismo: la muy desconocida
lucha de Lenin por el Socialismo” que procede de la llamada izquierda
cubana que mucho tiene que ver con la oposición al Gobierno cubano de los
gusanos de Miami. El artículo constituye una verdadera perla de suposiciones,
deseos reprimidos, frases truncas de Lenin, interpretaciones capciosas de
algunas declaraciones del líder bolchevique y toda una serie de complejos de
claro tinte trostkista, pretendiendo lo
imposible: colocar a Trotsky a lado, detrás y como sucesor de Lenin.
En otro artículo
nuestro ya hemos puesto en claro el odio inveterado que sentía el judío
respecto del gran Lenin a quién insultó y agredió del modo más canallesco
durante muchos años antes de la revolución a la que se coló por una
conciliación de Lenin que lo conocía a fondo y lo consideró siempre como un Judas.
Solamente
tocaremos acá el problemas de las naciones y nacionalidades al que se refiere el articulista trayendo a
cuento al escritor judío Moshe Levin que
divide dicho problema en el seno del bolchevismo en dos tendencias, según él:
«La primera de
Lenin que se empeña en conservar una perspectiva socialista a largo plazo y la
segunda de Stalin quién defiende la instalación de un gobierno fuerte por
encima de la sociedad en una muy fuerte continuidad de la autocracia zarista.
Los gérmenes del estalinismo se encuentran en la ideología estatista que se
desarrolla entre los combatientes de la guerra civil».
Tan fuera de
tiesto se encuentra Levin y nuestro inefable articulista cubano que no tiene la
decencia de citar precisamente la frase de Lenin cuando encargo al “maravilloso”
georgiano para ocuparse del tema nacional en nombre del partido y que concluyo
en la obra clásica de Stalin, «El marxismo y el problema nacional y
colonial».
Otro punto
canallesco es el de colocar fraudulentamente a Lenin en la “oposición”, algo
que desde el punto de vista histórico es una verdadera aberración. El
trotskismo y sus calumnias son realmente insoportables.
El trotskismo
impenitente y harapiento es uno de los culpables, junto al revisionismo
jruchovista, de la derrota del la Gran Ola Revolucionaria del Siglo XX, que
levantada por el Movimiento Comunista Internacional conducido primero por
Stalin y luego por Mao Tse-tung; tuvo su declive precisamente a la desaparición
física de esos grandes revolucionarios.
Dueña de muchos
sitios web, la clara tendencia trotskista, ahora se desata develando su
profundo carácter pro-imperialista. Se trata del artículo de Rebelión.org: “Una
revolución despreciada contra una dictadura implacable” Viento Sur.
En este engendro
publicitario, el autor califica la agresión imperialista y otánica contra Siria
como una “gran revolución” y se encarga de darle legitimidad con las consabidas
campañas anti-estalinistas desde la guerra mundial; empero inconscientemente
larga una gran verdad cuando la califica de “despreciada”. Efectivamente esa
aventura de los jecatos del Golfo, la ultra reaccionaria Arabia Saudita, el
Imperio colectivo y CIA, contra la independencia y soberanía de un pueblo
árabe, está desnudando completamente el carácter macabro del trotskismo
internacional y virtual. Esa supuesta “revolución” es efectivamente despreciada por todos los
revolucionarios auténticos del mundo que jamás pueden ser confundidos por la
falsimedia del imperialismo colectivo euro-yanqui.
Para nosotros los comunistas (mlm) ya no cabe la
menor duda: el Trotskismo internacional y el criollo en Bolivia, constituyen el
brazo orgánico de “izquierda” del imperialismo colectivo.
PCmlm
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