08-12-11
LA TRAGEDIA GRIEGA
GRECIA (La Helade), es la cuna de una de las más maravillosas culturas y civilizaciones creadas por el hombre desde sus orígenes. El pueblo griego ha heredado pues esa cultura prodigiosa de la historia universal.
El pueblo griego tiene además una gran tradición revolucionaria que se remonta contemporáneamente a la Segunda Guerra Mundial durante la cual Grecia, que era a la sazón una especie de dependencia neo-colonial británica, fue agredida militarmente primero por la Italia fascista de Mussolini, empero la poderosa resistencia del pueblo griego, puso en desbandada la ofensiva italiana. Después tuvo que venir la Alemania hitleriana en auxilio de los fascistas italianos, la misma que difícilmente pudo finalmente controlar y ocupar el territorio griego en 1942.
Casi como en todos los Balcanes, en Grecia, fueron los comunistas, organizados en el Partido Comunista Griego (PCG), los que estructuraron y llevaron adelante la resistencia nacional anti-fascista y anti-nazi. Mientras la derecha, la reacción y los monárquicos griegos colaboraban activamente con los ocupantes germano fascistas, los trabajadores, los campesinos y la clase media griega, dirigidos todos por el PCG, organizaron el Frente de Liberación Nacional y el Ejército de Liberación Nacional (ELAS), que no dio ni un momento de sosiego a los ocupantes fascistas.
Así llegó la última etapa de la Segunda Guerra Mundial. A fines de 1944, en noviembre y cuando todavía se combatía en Europa central contra los restos del hitlerismo, la Inglaterra del ultra-reaccionario Primer Ministro británico Winston Churchill, desembarcaba tropas en Grecia para asegurarse el control del país impidiendo que los comunistas griegos ocuparan íntegramente el país y conquistaran el poder total político, gracias y en virtud del sacrificio desplegado en la resistencia.
La invasión y desembarco británicos de noviembre de 1944, tuvo, entonces dos objetivos: 1°. Pretender cortar el avance de las tropas del Ejército Rojo que ya se acercaban a las fronteras septentrionales de Grecia y, 2°. Por otra parte, impedir el avance sostenido de los comunistas griegos hacia el poder político.
El desembarco anglo-norteamericano tuvo, desde un comienzo, un carácter francamente reaccionario. No eran tropas dispuestas al combate con los todavía ocupantes hitlerianos, sino unidades dislocadas para enfrentar el movimiento de liberación anti-nazi liderado claramente por los comunistas. Por ello mismo, apenas ocupado un pequeño territorio griego, se exigió del Frente y del Ejército griegos patriotas su total desarme, firmándose el famoso Tratado de Varkisa en diciembre de 1944. Sin embargo, "Varkisa" fue, en realidad, un desarme simulado, pues inteligentemente el Ejército Democrático Griego escondió las armas capturadas a los alemanes.
El Partido Comunista Griego dirigido en esos momentos por el patriota Marcos Vafiades, no podía permitir que, bajo la protección de las nuevas fuerzas ocupantes de Grecia, volvieran los colaboracionistas en nombre de la democracia. De modo que, poco a poco, se fueron dando condiciones para un enfrentamiento entre las fuerzas patrióticas del ELAS y los ocupantes de nuevo tipo. La Guerra Civil Griega que se desató en 1946, por la provocación directa y agresiva de los invasores ingleses y norteamericanos que atacaron militarmente al pueblo para impedir el acceso de los comunistas al poder y no fue una “iniciativa” de los comunistas, como dicen los revisionistas.
La guerra civil duró tres largos años, en los cuales los comunistas y patriotas griegos realizaron hazañas incomparables de heroísmo popular y revolucionario. Finalmente se constituyó en el norte del país un "gobierno comunista" que tenía una base territorial considerable y pretendía ser reconocido en el ámbito internacional.
Finalmente la revolución popular griega fue derrotada por la intervención extranjera y la barbarie fascista se enseñoreó en Grecia por muchas décadas. Miles de patriotas y revolucionarios fueron perseguidos, encarcelados y ajusticiados por el delito de haber levantado las armas en busca de un gobierno popular. Para eludir la persecución y la represión, miles y miles de combatientes dejaron el país por el exilio. Solamente la Albania socialista de Enver Hoxha, aliada fiel y estrecha de la Unión Soviética de Stalin y el Movimiento Comunista Internacional leal a la revolución mundial, prestó la colaboración correspondiente a los luchadores griegos recibiéndolos con fraternidad y solidaridad.
Grecia, con su revolución abandonada y sacrificada, tuvo que soportar después tres largas décadas de gobiernos militares fascistas vendidos al imperialismo inglés y norteamericano. Se la obligó a integrarse a alianzas reaccionarias como la OTAN y a aguantar dictaduras militares fascistas brutales como la de los famosos "coroneles negros griegos".
Sin embargo, la Grecia moderna, no obstante su grandeza y a pesar de prestar y proporcionar un inmerecido prestigio al malhadado Occidente, ha sido víctima del desarrollo del capitalismo, incorporándose a la zona marginal de Oeste capitalista. El sudeste y la zona mediterránea de Europa, incluyendo Grecia, quedaron pues convertidos en una periferia olvidada del desarrollo industrial capitalista nor-europeo.
Ahora ya en el siglo XXI, el valeroso pueblo de Sócrates, Pericles, Manolis Glezos y Zachariadis, se levanta contra la tenebrosa política implementada por un falso partido “socialista” que subordinado a la zona euro dominada ampliamente por la Alemania y Francia sumió a Grecia, así como a otros países, en la más calamitosa de las miserias.
Sin embargo, estos breves comentarios sobre Grecia tienen que ver con la catastrófica crisis que agobia a la euro-zona y que tiene a Grecia como la más perjudicada.
Analicemos los datos que nos proporciona la prensa:
- El gasto público se recortará en 5 000 millones de euros al reducirse los salarios públicos, las pensiones y el presupuesto de educación que será disminuido en un dramático 60%;
- Se crearán nuevos impuestos indirectos y una mayor tasación directa.
- Las exigencias del Banco Europeo y el Fondo Monetario Internacional serán cumplidas y así Grecia recibirá un nuevo crédito de aquellos entes financieros, recursos que servirán para pagar la deuda, la misma que lejos de disminuir seguirá aumentando mientras el hambre del pueblo alcanza dimensiones insoportables.
Empero, asómbrese el lector, los gastos para armamento militar y de seguridad interna serán incrementados. Es decir que en medio de la más brutal recesión económica, se ha aprobado ya aumentar el presupuesto militar. ¿Qué significa este desatino? Simplemente la clase dominante y su gendarme el Ejército se prepara militarmente para la próxima confrontación con el pueblo.
¡¡Efectivamente se necesita un ejército bien armado para contener el descontento popular!!
Frente a esta verdadera tragedia griega, al pueblo revolucionario no le queda más que la insurrección armada, desarmada o como lo decida el propio pueblo.
¡¡Camaradas griegos, preparar la guerra del pueblo contra los sádicos politiqueros, los banqueros y sus amos europeos y franceses!!
Hoy, a fines del Siglo y comienzos del nuevo Milenio, Grecia y su pueblo recuperan poco a poco sus derechos y, con la experiencia acumulada, se suman a la nueva ola revolucionaria, la definitiva, que ya se ha desatado en el Siglo XXI.
PCmlm
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