11-05-16
Int.
No. 329
¿SE PUEDE CONSTRUIR REALMENTE EL SOCIALISMO POR LA
VÍA PACÍFICA?
(Sobre el Socialismo del Siglo XXI)
El
ejemplo del Brasil post-PT y la destitución de Dilma Rousseff, nos está
mostrando cuánta verdad existe en las experiencias de todos los pueblos del
mundo que lograron históricas victorias mediante la vía revolucionaria de la
lucha armada popular y prolongada y que fueran vendidas por los “aprendices de
brujos” revisionistas que proclamaron
ruidosamente la caducidad del método revolucionario y proclamaron como victorioso
el método reformista.
La
posición de los marxistas (MLM), es conocida, empero no es comprendida en su
verdadera dimensión. No se trata, efectivamente, de tomar el camino reaccionario-trotskista
de trabajar intensamente junto a la derecha, incluso fascista, para derrocar a
los gobiernos progresistas que sustentan la vía “democrática” para construir un
socialismo “democrático”.
¡De ninguna manera!
Por el
contrario nuestro apoyo, por ejemplo, al compañero Evo Morales en Bolivia, no implica
una aproximación al progresismo burgués
y al parlamentarismo “democrático” burgués, sino solamente un eslabón para
preparar las condiciones más propicias para avanzar en el verdadero camino
revolucionario. En breve síntesis, una plataforma política que permita crear
condiciones para el proceso revolucionario.
Como ya
se ha probado hasta el cansancio, todos los movimientos progresistas, sino
aceleran y toman resueltamente el camino revolucionario, serán derrotados en el
terreno que han elegido y es el terreno de la reacción, la burguesía y el
imperialismo: la falsa democracia.
Si los históricos procesos como el soviético y el chino que
nadie duda el carácter esencialmente revolucionarios que tuvieron, fueron subvertidos
por la degeneración revisionista, las maniobras
reaccionarias y el injerencismo imperialista, ¿qué les queda a los
movimiento reformistas del Siglo XXI que proclaman que se debe sustituir las
balas con los votos?
Efectivamente,
el “Socialismo del siglo XXI” fue y es una
desviación seria de la voluntad revolucionaria de los pueblos que no pueden
ignorar la enorme importancia de los procesos francamente comunistas y los
errores internos que fueron la causa de su derrota. Los comunistas (mlm) consideramos
la lucha de los pueblos de América Latina y el Caribe como una nueva fase del
Socialismo en
el Siglo XXI, es decir la tercera ola
revolucionaria mundial que ya ha comenzado con espectaculares victorias en la
primera década y un reflujo evidente a mediados de la segunda década sobre todo
en América Latina.
No nos
regocijamos con la derrota del PT en el Brasil, pero no hay mal que por bien no
venga, pues ahora habrá que luchar por derrocar al fascismo brasileño y
plantearse claramente objetivos revolucionarios y socialistas más allá del
reformismo que plantearon los líderes del PT Lula y Dilma.
¿Acaso
Dilma no hizo de Temer su acompañante de fórmula? ¿Acaso el PT no tuvo el error
de no apoyar a los movimientos sociales
de los campesinos sin tierra que piden y luchan por una profunda revolución
agraria en el Brasil? ¡No!, Lula y Dilma prefirieron hacer las “paces” con
sectores reaccionarios a fin de ganar votos que en el momento preciso mostraron
su verdadero rostro traicionando la ingenuidad de los reformistas.
En fin,
ahora se trata de enmendar errores y movilizar a las amplias bases millonarias
de los pueblos brasileños para encarar la ofensiva restauradora del régimen
neoliberal.
PCmlm-Bolivia.
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