CIEN MIL MINAS EN FRONTERA, VIEJA AGRESION CHILENA

04-08-11

Pronunciamiento Político Nacional No.  161

CIEN MIL MINAS EN FRONTERA,

VIEJA AGRESION CHILENA

Definitivamente no es que nuestro criterio revolucionario en torno a las relaciones de Bolivia con Chile estuviera teñido de un chauvinismo barato.

Por el contrario son las actitudes y las políticas de los gobiernos oligárquicos de Chile que responden a los intereses de clase que tienen, que  constituyen efectivamente una política totalmente anti-boliviana.

Las clases oligárquicas dominantes de Chile, que ahora mismo soportan un furioso levantamiento popular,  no pueden responder como corresponde a las exigencias bolivianas para una salida soberana al océano Pacífico. Por el contrario se dedican a atacar sañudamente a Bolivia y con sus hipócritas proposiciones en torno a negociaciones directas, no hacen sino postergar indefinidamente y para las calendas griegas, una solución real al conflicto que, según ellos, “no existe”.

Ahora tratamos un tema de gran importancia y trascendencia internacional. Se trata de la siembra de cientos de miles de minas subterráneas que Chile ha colocado en la frontera común. Este hecho, por sí solo, constituye una verdadera agresión contra nuestro país y pudiera ser un pretexto para que las ambiciones territoriales anexionistas de nuestro indeseable vecino se hagan realidad, respondiendo, como decíamos, a una política sistemáticamente agresiva contra Bolivia.

Chile es un Estado que da su espalda a América Latina y está simplemente observando a Europa y a los Estados Unidos para ser parte del “primer mundo”. Una prueba de ello es la “solidaridad” del Gobierno de Pinochet con la agresión británica a la Argentina por la toma de las islas Malvinas.

Chile tiene relaciones conflictivas con el Perú por sus agresiones fronterizas en las aguas territoriales. Con la Argentina estuvo casi en guerra internacional por el canal del Beagle. Con Bolivia no existen relaciones diplomáticas. En una palabra no tiene Chile ninguna relación normal y amistosa con sus vecinos.

Mientras Chile y su pueblo oprimido no se liberen de su oligarquía reaccionaria y fascista seguirá siendo un paria moral de nuestra solidaria América del Sur, de UNASUR y de El ALBA.

Las actuales movilizaciones de los estudiantes chilenos contra su Gobierno por las condiciones neoliberales en la educación, constituyen una esperanza en una futura rebelión de las clases populares chilenas para salir del oprobio pinochetista “sin Pinochet”.

Exigimos que el Gobierno de Chile proceda en un tiempo muy corto, a desminar la frontera que constituye un peligro inminente para las poblaciones fronterizas.

PCmlm.